En el departamento del Cesar inició un proyecto de rescate de la lengua palenquera, que tiene como objetivo que las nuevas generaciones conozcan las expresiones que inventaron sus antepasados en su camino hacia la libertad.
Con este proyecto también se pretende que no muera la lengua palenquera, y que puedan rescatarse los elementos identitarios de los negros de San Basilio de Palenque, en pro de mejores condiciones de vida para sus comunidades, hoy diseminadas por el Caribe Colombiano,
Este proceso es liderado por Ku-Suto (Asociación de Organizaciones de Comunidades Negras del departamento), con el acompañamiento del Programa de Desarrollo y Paz del Cesar y el apoyo del Gobierno Departamental, y que para su primera fase proyecta la conformación de una asociación, para luego emprender un proceso de identificación por veinte municipios del Cesar en los que habitan palenqueros, para determinar en qué condiciones se encuentran y qué tipos de relacionamientos, y con quienes, tienen en la actualidad.
En la mañana de ayer domingo, Javier Pardo Cassiani, coordinador de Ku-suto, se reunió con líderes palenqueros en Valledupar para avanzar en la conformación de la asociación y definir una hoja de ruta hacia sus propósitos. “Palenque es la gente. ‘Vendemos’ a Palenque como la persona, la parte inmaterial, el pensamiento”, explicó Pardo Cassiani, en medio de la reunión, en la que algunos adultos sostenían diálogos en su lengua originaria, ante la mirada de asombro de jóvenes que no la entienden.
Por su parte, Panfido Valdés, un músico y líder palenquero, asegura que “la lengua se ha perdido porque las nuevas generaciones se pegan más bien a la tecnología, que ha avanzado mucho; a mí me gustaría que todo el palenquero me hablara en su lengua. Eso es lo que queremos con este proyecto. No quiero que mi lengua se pierda”, y añadió que en los centros educativos de Palenque la lengua es una materia.
La lengua
La lengua tiene una base léxica española, con características morfosintácticas de lenguas autóctonas africanas, con énfasis en la familia lingüística Bantú. Los palenqueros reunidos ayer en Valledupar trajeron a memoria un relato de sus mayores, que datan del siglo XVI, cuando fue fundado san Basilio de Palenque, en las faldas de Montes de María, a unos cincuenta kilómetros de Cartagena, a donde llegaron los negros (esclavizados) liberados por Benkos Biohó y que desarrollaron unos códigos lingüísticos para comunicarse entre ellos, sin que los españoles entendieron lo que estaban diciendo; de ese modo, inventaron una nueva forma de llamar algunas cosas y le incorporaron vocablos españoles y africanos.
Hablar de lengua palenquera va más allá de la mera expresión, pues implica una forma de pensar, de ser, de sentir e interpretar las realidades propias de una comunidad, cuyos legados ancestrales se evidencian en los usos y costumbres de sus hablantes.
Dadas las características únicas de formación cultural y de su lengua, San Basilio de Palenque, primer Pueblo Libre de América, fue declarado por la Unesco Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad.
¿Por qué es importante el proyecto?
Ann Margateh Murcia, experta en asuntos Étnicos y Poblacionales del Programa de Desarrollo y Paz del Cesar, explica que “el proceso de recuperación de la lengua palenquera es importante porque a través de él se fortalecen todos los procesos de auto reconocimiento; es decir, la lengua como un elemento en el que se vincula la cultura, la historia, el saber ancestral; como un elemento que permite vivir la pertenencia étnica. Entonces a través del proceso de recuperación de la lengua palenquera lo que se está buscando es un impulso también para la recuperación de las practicas ancestrales, pero también del reconocimiento del territorio y de sujetos étnicos diferenciados”.
