Este jueves 20 de noviembre se conmemoran cinco años de la muerte del compositor de música vallenata Romualdo Brito, quien falleció en un accidente de tránsito en carreteras del departamento del Cesar, a la altura del municipio de Curumaní. El artista viajaba con su hijo y yerno rumbo a Bogotá para reencontrarse con su familia.
La muerte de Romualdo Brito causó un profundo desconsuelo entre sus familiares, amigos y seguidores del folclor vallenato, quienes recordaron a otros artistas que perdieron la vida en circunstancias similares, entre ellos Patricia Teherán y Martín Elías Díaz.
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A través de sus redes sociales, la cantante Indira de la Cruz, viuda del compositor, recordó algunos momentos de aquel fatídico día en el que recibió la llamada que confirmaba la muerte de su esposo y las heridas que había sufrido su hijo.
“Ya han pasado 5 años de ese oscuro día donde todo cambió, dónde todo dio un giro de manera abrupta e inexplicable y dónde la vida me mostró que no era como yo pensaba ni como queríamos, si no como él lo tenía planeado, así como tienen el plan para cada uno de nosotros. En ese momento sentí que mi vida se desmoronaba… Dios ese día te hizo el llamado y ese es un llamado del que no tenemos salida”, escribió en su cuenta de Instagram.
Añadió: “Ese día Dios quiso que Romualdo JR. quedara aquí para tenerte siempre cerca, por eso pienso que Dios acomoda todo en su lugar. Dios me ha hecho entender que sus designios son perfectos y que aunque nos parta el alma, son irrefutables. No hay un solo día que no te recordemos, junto a mis hijos, mi familia, los amigos que me encuentro”.
“Me queda la satisfacción de lo vivido”
En su relato, Indira de la Cruz también contó cómo ha transcurrido su vida desde que falleció su esposo y agradeció a Dios por los 23 años que pudieron compartir como pareja, colegas y amigos, conformando un hogar.
“Han sido 5 años de mucho aprendizaje, de mucho discernimiento y paciencia para aceptar todo lo que trajo tu partida. Me queda la satisfacción de lo vivido, de 23 años llenos de amor, comprensión, complicidad, ayuda mutua, solidaridad, discusiones, si discusiones, las mismas que sirvieron para ir entendiendo que en una convivencia no todo es color de rosa pero que a la vez nos hicieron edificar mucho más esa unión”, expresó.
El legado de Romualdo Brito
Romualdo Brito López era oriundo del corregimiento de Tomarrazón, jurisdicción de Riohacha, La Guajira. A la edad de 16 años decidió mostrarle sus canciones al acordeonero y cantante Alfredo Gutiérrez, sin tener éxito en su hazaña. Un tiempo después, el artista lo conoció y le pidió disculpas por la forma en que lo trató ese día en un hotel en Riohacha.
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En una entrevista para El Espectador, concedida en el 2020, contó que sus primeras canciones las compuso para un cumpleaños de su mamá cuando todavía era un jovencito y reveló que su hora preferida para componer era a las cuatro de la mañana o cuando viajaba en avión para desestresarse, ya que era ‘temeroso de volar’.
Romualdo Brito dejó un legado de cerca de 1.500 canciones, interpretadas por figuras como Diomedes Díaz, Poncho Zuleta, Iván Villazón, Silvestre Dangond, Jorge Oñate, Otto Serge, Los Embajadores del Vallenato y Beto Zabaleta, entre otros. Entre sus obras más reconocidas figuran ‘Esposa mía’, ‘Parranda, ron y mujer’, ‘Ni amigos ni novios’, ‘La difunta’, ‘Manda cachaza’, ‘La corté’, ‘No tiene ná’, ‘Cabecita loca’, ‘Mis viejos queridos’, ‘El santo cachón’ y ‘La yuca y la tajá’.
Tenía planeado lanzar un libro en el que narraba la historia de 45 de sus composiciones, aquellas que lo posicionaron como uno de los compositores que más le aportó al folclor vallenato.
Así fue el accidente
El accidente que cobró la vida de Romualdo Brito ocurrió la mañana del 20 de noviembre de 2020 en jurisdicción de Curumaní, en el centro del Cesar. El compositor viajaba en un vehículo de placas JCW-407, color blanco, y a la altura del corregimiento de San Roque cayó a una cuneta profunda.
Según el reporte de las autoridades, al perder el control del vehículo y salirse de la calzada “terminaron colisionando contra un objeto fijo, baranda metálica y un árbol, causando el volcamiento total”.
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En la camioneta también viajaban su hijo, Romualdo Brito de la Cruz, quien resultó con lesiones en las piernas, y su yerno, Alex Miguel Montero, quien conducía el vehículo.
Los restos del compositor reposan en el cementerio del corregimiento de Tomarrazón, jurisdicción del municipio de Riohacha, en La Guajira.
POR: LUCÍA MENDOZA CUELLO/ EL PILÓN.
