La entrega de 6 predios a comunidades indígenas suma una inversión mayor de 430 millones de pesos cuyo fin es la ampliación de zonas de resguardos de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Con una inversión superior a los 430 millones de pesos, Corpocesar adquirió seis predios que suman más de 390 hectáreas, como parte del apoyo a las comunidades indígenas de la región de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Los predios ubicados en el área de influencia del pueblo cultural Seikun que hace parte del Cordón Ambiental de la Sierra Nevada y de los pueblos culturales conocidos como Talanqueras, tienen áreas de bosques y zonas cultivables que deben ser manejadas por las comunidades indígenas de manera sostenible.
“Le estamos entregando a las comunidades indígenas del departamento, tierras para la ampliación de las zonas de resguardo de la Sierra Nevada de Santa Marta. Con el objeto de que protejan y recuperen ambientalmente la cobertura vegetal de las áreas degradas, conservando el 70 % de las áreas boscosas y utilizando sólo el 30 % para el desarrollo de proyectos productivos de acuerdo a sus usos y costumbres”, informó Virgilio Calderón Peña, director general de Corpocesar.
Dijo el director de Corpocesar que esta es una forma de fortalecer el territorio indígena. “Ellos recuperan sus sitios sagrados y nosotros aseguramos que las familias que vivían en las partes altas de la Sierra permitan que estas áreas se recuperen de manera natural garantizando con esta medida, la producción de agua a futuro y facilitándole a varias familias una mejor calidad de vida en zonas cultivables y con mayor calidad de recursos”, indicó.
Las familias arhuacas que ocuparán las 391 hectáreas, en las zonas de influencia del pueblo cultural de Seikun en la Vereda de Villa Germania en el municipio de Valledupar, provienen de los asentamientos indígenas de Sogrone y Donachuí ubicados en el corregimiento de Sabana Crespo, en el mismo municipio.
La entrega está enmarcada en un convenio entre Corpocesar y los resguardos indígenas Arhuaco y Kankuamo para el saneamiento de tierras, el desarrollo de proyectos productivos sostenibles y la educación ambiental.
El correcto manejo de los predios por parte de las comunidades indígenas, contará con el apoyo y seguimiento de Corpocesar como autoridad ambiental, permitiendo que las comunidades indígenas hagan un manejo sostenible de las zonas entregadas tal y como lo establece la Ley.
La entrega de 6 predios a comunidades indígenas suma una inversión mayor de 430 millones de pesos cuyo fin es la ampliación de zonas de resguardos de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Con una inversión superior a los 430 millones de pesos, Corpocesar adquirió seis predios que suman más de 390 hectáreas, como parte del apoyo a las comunidades indígenas de la región de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Los predios ubicados en el área de influencia del pueblo cultural Seikun que hace parte del Cordón Ambiental de la Sierra Nevada y de los pueblos culturales conocidos como Talanqueras, tienen áreas de bosques y zonas cultivables que deben ser manejadas por las comunidades indígenas de manera sostenible.
“Le estamos entregando a las comunidades indígenas del departamento, tierras para la ampliación de las zonas de resguardo de la Sierra Nevada de Santa Marta. Con el objeto de que protejan y recuperen ambientalmente la cobertura vegetal de las áreas degradas, conservando el 70 % de las áreas boscosas y utilizando sólo el 30 % para el desarrollo de proyectos productivos de acuerdo a sus usos y costumbres”, informó Virgilio Calderón Peña, director general de Corpocesar.
Dijo el director de Corpocesar que esta es una forma de fortalecer el territorio indígena. “Ellos recuperan sus sitios sagrados y nosotros aseguramos que las familias que vivían en las partes altas de la Sierra permitan que estas áreas se recuperen de manera natural garantizando con esta medida, la producción de agua a futuro y facilitándole a varias familias una mejor calidad de vida en zonas cultivables y con mayor calidad de recursos”, indicó.
Las familias arhuacas que ocuparán las 391 hectáreas, en las zonas de influencia del pueblo cultural de Seikun en la Vereda de Villa Germania en el municipio de Valledupar, provienen de los asentamientos indígenas de Sogrone y Donachuí ubicados en el corregimiento de Sabana Crespo, en el mismo municipio.
La entrega está enmarcada en un convenio entre Corpocesar y los resguardos indígenas Arhuaco y Kankuamo para el saneamiento de tierras, el desarrollo de proyectos productivos sostenibles y la educación ambiental.
El correcto manejo de los predios por parte de las comunidades indígenas, contará con el apoyo y seguimiento de Corpocesar como autoridad ambiental, permitiendo que las comunidades indígenas hagan un manejo sostenible de las zonas entregadas tal y como lo establece la Ley.