Absolutoria fue la sentencia emitida por el Juzgado Segundo Penal del Circuito de Valledupar, luego de realizada la diligencia de juicio oral  y conocido el sentido del fallo contra de Hender Antonio Anaya Tovar, de 23 años, acusado del delito de acto sexual  agravado con menor de catorce años.
De acuerdo  a lo expuesto por la Fiscalía, Anaya Tovar sería el responsable del delito de  acto sexual (consistentes en caricias y besos) contra un menor de edad en hechos ocurridos el 9 de mayo de 2009 en el primer piso de la casa fiscal del Batallón de Artillería No. 2 La Popa.
Se ventiló en la audiencia que, el acusado aprovechó que el menor estaba solo y lo manoseó. De esto dio cuenta un testigo quien agregó que al ser sorprendido, Anaya salió despavorido del lugar por la parte de atrás de la edificación.
Según un dictamen psicológico al que fue sometido el pequeño, éste presentó pesadillas, ansiedad y problemas de digestión. Precisó el especialista que se percataba un cambio conductual y afectivo. Los que podría ser consecuencia de un hecho traumático.
Por su parte, la defensa solicitó sentencia absolutoria ante la ausencia de la testigo, y según quedó consignado en el expediente, la Policía se queda sin respaldo, porque la escasa edad del menor (dos años), no le permite un reconocimiento en fotografías.
Luego de analizar lo anterior la Juez Segundo Penal del Circuito de Valledupar, Gloria Mariño Quiñones decidió  absolver a Hender Antonio Anaya Tovar por el delito que se le imputaba por parte de la Fiscalía General de Nación.
Mariño Quiñones también dejó constancia que contra este fallo procede recurso de apelación.